27 de diciembre 2008
Un extraño escalofrío le recorrió la espalda al cruzarse con aquel gato negro.
Se sintió como un personaje de un relato de primaria, pero no pudo evitar que un extraño escalofrío le reorriese la espalda.
Se tapó la boca, para no dejar constancia de su vulgaridad, pero las palabras se iban arremolinando sobre su cabeza: escalofrío, espalda, gato negro.
Sintió como un escalofrío le atravesaba la espalda.
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